El
inicio de fiestas del Aste Nagusia pretendía
ser un acontecimiento popular de masas, y el ente
pensante del programa quiso encabezar cartel con un
veterano terror de nenas y no tan nenas de solvencia,
pero falló el canadiense Bryan Adams, y aprovechando
que otro grupo con solera y solvencia giraba por Europa
nos encasquetó, y nos vino que pintado a algunos
(gracias), a los chicos de Jim Kerr.
Me
parece que no queda casi nadie de la formación
que fuera más prolífica y talentosa,
y la cual elevara a las cumbres de la música
pop de calidad al grupo, a excepción del propio
Kerr claro está, pero qué más da, si
tenemos a unos chicos que saben leer partituras y
nos tocan lo de antaño. Pues así fue,
y el concierto estuvo marcado una vez más,
supongo que sea general en la elección de temas
por Kerr, por el famoso doble directo 'In the city
of life' que debemos tener la mayoría, por
aquello de disco-pop-referencia de los ochenta. No
obstante, y muy agradecidos, disfrutamos de esa música
que tantos recuerdos nos traía, del marco en
el que se desarrollaba el concierto (escalinata y
explanada anexa al museo Guggenheim) y del estridente
modo de moverse de Kerr mezcla entre danza maorí
y Leonardo Dantés
Eso
sí, las canciones del nuevo trabajo son un intento
más de continuación de estilo y forma
de la fórmula mágica que años
atrás descubriera el joven alquimista Kerr
y que hoy ya pesa por repetitivo y denota claramente
la inercia de un músico enquilosado.
Aparte de juicios sobre el trabajo del grupo, supongo
que Kerr lleve gran parte del peso del proceso creativo
y de ahí mi crítica, el espectáculo,
a pesar de la pobreza en cuanto a despliegue de medios
lumínicos y escenográficos (más
bien brillaron por su absoluta ausencia), se hizo
ameno por la sintonía de los músicos
con el ambiente, tanto espacial como humano, y por
la nada agobiante presencia de espectadores, y no
quiero decir con esto que estuviéramos cuatro
amigos (calculo que allí podría haber
más de 5.000 personas), que ayudan sin duda
a disfrutar plenamente de lo que se desarrolla en
el escenario. El grupo está compuesto por guitarra,
bajo, teclados, batería y cantante, todos correctos
aunque hubiese preferido un guitarrista más
atrevido en directo. Destacable es el batería
que intento alguna cosa más y sobre todo la
voz de Kerr que sigue impoluta con el paso de los
años.
Supongo
que es tarde para cambiar, pero si eso es lo que le
gusta
Este
concierto se celebró dentro de la Semana Grande
de Bilbao (Bilbo Aste Nagusia 2002) el día
17 de Agosto en la Plaza del Gas.
Artículo:
Pedro de Andrés.
(Fecha de la publicación: 26/08/2002)
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