Otra vez más me toca tragarme las pruebas de sonido de un grupo mientras espero la ocasión hacer una entrevista.
Por lo general no es plato de gusto, sobre todo a la hora de probar el bombo de la batería, pero ahora es distinto, los instrumentos desprenden otra magia, magia no electrificada y es que Malevaje, como mucha gente debe saber, no es un grupo de rock. ¿De pop, entonces?, pues mira tampoco, ya se que te puede sonar extraño pero Malevaje es un grupo de tangos. ¿Ah, pero es que la gente joven hace tangos?, pues mire usted, sí, y además muy bien.
Malevaje lo componen Guadalupe Sánchez (piano), Jorge Angel Muñoz (contrabajo), José Luis López (chelo), José Amador Pardo (violín), Jorge Lema (bandaneón), Luisa Merino (bailarina) y Antonio Bartrina el cantante y cabeza visible del grupo al cual me dispongo a entrevistar.
Decía antes que las pruebas de sonido son otra cosa. Mientras empiezo a charlar con Antonio le requieren para una prueba de acompañamiento y, ni corto ni perezoso entona un sentimental tango desde las butacas mientras sus compañeros de grupo le siguen desde el escenario. El resultado está digitalizado al final de la entrevista.
Tras la demostración, nos vamos a tomar unas cervecitas para mitigar el calor de esta tarde de verano, y poder charlar más tranquilamente. Antonio es el único miembro de aquel grupo que empezó en plena movida madrileña, con gente de los Coyotes o Gabinete Caligari, haciendo fusión de tango con rock y hoy, mucho más clásicos, tienen en la calle un disco de versiones de su venerado Carlos Gardel (de hecho el nombre del grupo viene de un tango del ilustre argentino).
¿Cómo os dio por el tango?
Yo siempre he sido muy tanguero, me viene de familia. Mi abuelo lo era, mi padres también, a pesar de ser madrileños. Yo siempre cantaba tangos en la fiestas de los amigos. hasta que nuestro amigo Rafa nos propuso cantar en su bar, El Salero. A la gente le gustó, hubo una discográfica que nos propuso grabar, grabamos, el disco se vendió más o menos bien así que seguimos, se fue liando la cosa y así hasta hoy.de eso hace ya doce años.
Para vuestro último trabajo habéis contado con colaboraciones de lujo. ¿Cómo surgieron?
Bueno, en primer lugar hemos contado con el Maestro Larrea, que trabajó muchos años con nosotros. Luego se fue a Argentina porque tiene 79 años cumplidos y ha colaborado con nosotros haciendo los arreglos de estos temas tan clásicos de Carlos Gardel. Luego, a raíz de eso, hemos pensado ¿por qué no llamamos a otros amigos?, entonces llamamos a Raimundo Amador, a Joaquín Sabina, a Jorge Pardo, Aute. me falta alguien. ¡ah!, Santi, Santiago Auserón, Juan Perro.
Entonces, ¿eran todos amigos?
Sí, menos Luís Eduardo Aute, nos conocíamos pero tampoco éramos íntimos, pero bueno, a partir de ahora ¡ya somos amigotes!
Vosotros habéis tocado tanto al aire libre como en locales cerrados. Se nota mucho la diferencia en una música que en principio es bastante, digamos, íntima?
Nosotros tocamos generalmente en teatros. La cosa varía cuando lo cambiamos por un bar grande, una discoteca o una plaza. Aunque el alma es la misma, es diferente. En un teatro la gente paga su entrada, se sienta en la butaca y se está calladita, escuchando. En cambio, tocando en plazas ya no es igual, seguramente esta noche saldrá algún espontáneo a bailar. Hace unos meses estuvimos tocando en Suiza. Yo pensaba que los suizos, con el clima más frío que tienen por ahí arriba iban a ser más sosos, y mira tú por donde salieron no una sino cuatro parejas a bailar. Yo pensaba que eran argentinos o españoles emigrados pero ¡qué va!, eran suizos de toda la vida, ¡y bailaban bien, además!
¿Vosotros, qué música escucháis?
Yo escucho prácticamente de todo, salvo el bakalao y ese tipo de música, que no lo soporto, no sé, a lo mejor es por que ya soy un poquillo mayor, pero aparte de eso escucho blues, flamenco, rock.¡bailo el rock como Dios!.
Vuestra agenda está bastante repleta. ¿Giráis todo el año juntos u os dais vacaciones?
¡Que va, no descansamos!. Siempre estamos juntos. Ahora acabamos esta girita de verano, luego vamos a Francia, luego a Suiza, luego a Italia y en Octubre empezamos el recorrido de invierno, que es más tranquilo; en teatros, permaneciendo varios días en el mismo sitio. a mi me gusta más esa forma de trabajar. El primer día es mucho curro, porque tienes que probar, dejarlo todo bien matizado. Los restantes vas una hora antes del concierto, para que todo esté en orden.es que la gira del verano, siempre viajando, es un poco coñazo.
En este momento llega el mánager y le dice a Antonio que termine la entrevista, que tienen que subir al hotel. Antonio sostiene apaciblemente el botellín y me dice que siga con la entrevista, así que empiezo a sentirme entre la espada y la pared. La cosa sigue, y ante su insistencia, al tanguero madrileño no se le ocurre más que decirle, “¡estás despedido, tío!”. Aquel se lo toma con calma, no debe ser la primera vez que lo “despide”, así que decide irse a reagrupar al grupo, con lo cual continuamos con nuestra charleta apoyados en la barra del bar, ¡tan ricamente!.
Ultimamente, parece que la gente joven tiende más hacia la música de influencia sajona, olvidando un poco lo latino. Estás de acuerdo..
No estoy de acuerdo. Yo creo que esto ha ocurrido estos años de atrás, de hecho lleva ocurriendo veinte años. Creo que precisamente ahora está ocurriendo lo contrario, que precisamente la gente joven está volviendo la vista a las músicas latinas, a otro tipo de cosas que no es el pop y el rock: la salsa, el merengue, el son cubano, ¡el flamenco!. En los últimos años ha habido un resurgir del flamenco gracias a la gente de Ketama, Raimundo Amador, a Pata Negra, a la Barbería del Sur y sobre todo a Camarón, que fue el que rompió el esquema clásico flamenco. Por medio de la fusión, de la innovación, ha hecho que la juventud mire hacia otra parte.
Curioso tema. ¿Vosotros qué opináis de las fusiones? Porque vosotros sois bastante clásicos…
Nosotros somos más puristas pero relativamente, hay tangos nuestros que son mezclas de tango con chotis o rumba. Este disco es más clásico aunque el arreglo es bastante más moderno.
A mí el mestizaje me parece bueno siempre que sea por algo, no el mezclar por mezclar, mezclar con sentido común.
¿No crees que se marginan a los que no mezclan?
A mi es que me da igual. Lo que no quiero entrar tampoco es en el juego de: ahora está de moda la salsa y hacemos tango-salsa o tango-flamenco tango-rock, o tango hostias.
Finalmente, ya reunido el grupo, tengo que dar por finalizada la entrevista, más pensando en el pobre mánager que en otra cosa porque Antonio está dispuesto a darme cuerda todo el rato que sea. Finalmente se suben al hotel. Pregunto, ¿qué se debe?. Nada, ya está pagado. En fin, ¡a vuestra salud, compadre! (léase con acento tanguero).
Entrevista realizada por Félix Vera
Tango cantado al aire por Antonio Bartrina (por cortesía de Malevaje):
8 KHz. Calidad mono.
Formato Microsoft ADPCM “.WAV”. 30 segundos aproximadamente. 115 Kbytes
Formato “.AU”. 30 segundos aproximadamente. 225 Kbytes
Este artículo fue publicado originalmente en La Factoría del Ritmo Número 4 (sección: Entrevistas).
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