Un disco nada revolucionario en contenidos, pero certero en resultados. Una buena colección de canciones con gancho y llenas de emoción.
UEK es el más reciente proyecto musical de Keu (Jesús Mari Agirretxea), el que fuera guitarrista de los míticos Etsaiak y líder del grupo FJord.
UEK nació inicialmente como vehículo para dar salida a sus canciones más tranquilas, principalmente acústicas, pero la disolución de FJord cuando estaban preparando un nuevo álbum y tenían parte del repertorio compuesto llevó a Keu a repesar el concepto de UEK y transformarlo, al menos de momento, en una banda de rock.
Para ello fichó a Mikel Arakistain (FJord y Etsaiak) para el bajo y Jon Gurrutxaga (Arima Beltza) para la batería.
Junto ya grabaron "Heltzear Diren Egunak" (2006) y ahora presentan "Uhinak", un disco de doce canciones, donde dan salida a sus sentimientos y emociones, dando espacio para que el amor, la soledad, las injusticias, el miedo e incongruencias del mundo y la sociedad transiten por sus canciones, aunque aportando rayos de esperanza y optimismo para que las situaciones mejoren.
El nuevo álbum es ante todo rockero, con mucho de hard-rock, bastante de rock melódico y detalles que llevan a pensar en el blues o en los estilos que Keu practicó en el pasado (hardcore, metal, etc.).
Pero "Uhinak" es ante todo un disco directo, fresco y a la vez rotundo. Que ha prescindido de las artimañas de estudio para defender las canciones con las mismas posibilidades que los instrumentos usados (bajo, batería, guitarra y voz) ofrecen en directo.
En resultado es realmente bueno. Con una colección de canciones con garra, que llegan al oyente con facilidad y que en algunas ocasiones resultan especialmente acertadas: "Ugertutako kate estuak" (plena de fuerza, con una melodía que se pega como el velcro), "Denbora galduaren jabe berriak" (con la misma magia de la anterior, aunque con un plus de contundencia y un sensacional solo de guitarra),
"Momentu bakarra¡¡¡" (un bonito medio tiempo, con toques reggae), "Non ote dira" (una balada para emocionar en los conciertos y encender los mecheros cuando baje la luz), "Baztertuak" (para despegar y (casi) lanzarse al pogo) o "Bizitza birtualean" (llena de emotividad).
Un álbum para vivir el día a día a ritmo de rock.
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