Primera parte de la crónica sobre lo acontecido en este festival tan especial que se celebra en el monte Kobetas, en la edición del presente 2018.
Con el BBK Live no se puede tener término medio, o te encanta y te subes todos los años a pata medio monte Kobetas o no te motiva para nada y te reservas para el resto de citas festivaleras que, año tras año, se solapan el mismo fin de semana de julio. Nuestra opción estaba clara…
Este año la ilusión era doble. Por primera vez mi hija adolescente tenía una edad ya bastante adecuada para iniciarse en el mundo festivalero (y hasta le hacía ilusión acudir con su padre!) y, además, íbamos a poder VER EN PRIMERA FILA a una de las pocas artistas que veneramos ambos, Florence Welch. La cosa apuntaba bien, un cartel repleto de lujos asiáticos como The XX, Noel Gallagher, Chemical Brothers, Childish Gambino, David Byrne, Florence + The Machine, Gaz Combees, Cooper, y tantos otros que descubriríamos ese fin de semana de julio…
Como sería bastante largo de detallar todo lo que allí vivimos, y los textos largos ya sabemos que la gente se los salta, me quedaré con los momentos que más nos llenaron del festival.
Sería injusto no comenzar por la Reina de la primera jornada, Florence Welch y sus Florence + The Machine, a la que conseguimos, no sólo ver desde la primera fila, sino tocar, abrazar y hasta compartir su micro por unos instantes. No era la primera ocasión que la disfrutaba en directo (ya tuve ocasión en su tour anterior en el Palau Sant Jordi) por lo que su presencia en las tablas no me sorprendió. Un auténtico animal escénico que lo mismo te canta que te baila o te regala danzas oníricas propias de ritos iniciáticos celtas. Comenzando con un poco conocido, entre los asistentes menos iniciados, “Between two lungs”, fue encadenando hit tras hit como “Queen of Peace”, “Delilah”, “Sweet nothing”, “Dogs days are over”, “You got the love”, “Ship to wreck”, “What kind of man”, o el ya clásico “Shake it out”, con temas como “Hunger”, “Patricia” (dedicado a la grandísima Patty Smith) o “Big God” de su último largo “High as hope”. Lamentablemente la ingente cantidad de fotos y videos que, tanto como de ella como de Childish Gambino, había ido recogiendo, para mostraros, se perdieron en el móvil gracias a una tarjeta de memoria defectuosa (momento te-agarro-por-la-cintura-que-sino-te-me-caes incluido). Y es que este año, a pesar de que en jornadas anteriores sí habíamos podido acudir como prensa acreditada, los señores del BBK Live tuvieron a bien denegarnos el necesario pase, por lo que la entrada con cámara profesional fue imposible. Esperemos que en futuras ocasiones tengan en cuenta lo que, tanto desde este humilde blog como desde la web LA FACTORIA DEL RITMO y su programa hermano de radio en ARCO FM, venimos haciendo para promocionar el festival constantemente durante todo el año. Para los que aún no han tenido la suerte de poder ver a Mrs Welch en directo sólo me queda animarles a que vayan ojeando sus próximas citas en España el año que viene porque no conviene perdérsela.
Antes de Florence ya había calentado al personal bien a gusto el gran Childish Gambino, nuestro Top 2, que nos brindó una master class de lo que es rock, soul y mucho, mucho, sentimiento. No es la “Woman del Callao” pero “tiene mucho haunt, tiene mucho tempo y tiene mucho down”. El conocido actor, humorista, guionista, director, productor y no se cuantas cosas más, comenzó con un sensacional “Me and your mama” que ya nos hacía presagiar los mejores pronósticos, al que fue encadenando, temazo tras temazo, con “Boogieman”, “California”, “Riot”, “Sober” o “Redbone” o los nuevos “Feels like summer” y “Summertime magic” que no desmerecieron el climax del resto. Para finalizar una bomba sonora como “This is America”, uno de los videos más virales de este año, y punto álgido de un show en el que sudó lo que no está escrito y nos recordó a gente como James Brown o Marvin Gaye salvando las lógicas distancias.
El Top 3 de este festival se lo llevan, y de calle, unos chicos que, a pesar del sol de justicia que estaba cayendo, la mala hora, las minúsculas dimensiones del escenario que les ofrecieron y la poca acertada ubicación del mismo a la entrada del recinto, nos dejaron a todos los que nos acercamos con la boca más que abierta. No fueron otros que Carolina Durante. Ya conocíamos temas virales como “Cayetano”, “300 golpes” o “El himno titular” y teníamos oídas cosas como que en directo se salían, que eran los nuevos Nikis… pero su complicidad con el público, el ambiente de fiesta que crearon y la energía que contagiaron a todos era impredecible.
En un momento dado de la canción “Cayetano”, no me digas cómo ni porqué, el gentío tomó al asalto y abarrotó hasta el infinito, cual Bastilla se tratara, el diminuto escenario de tal forma que tuvieron que cortar el sonido a mitad del tema para poder desalojarlos. Auténtico delirio y momentos que pasan pocas veces en un festival. Hay que seguirles la pista ya y, por favor, Escenario Principal Ya!
Nuestro Top 4 va para Gaz Combees, otrora lider de los extintos Supergrass, y reconvertido en un experto en todos los palos del rock que le dejen tocar. Arropado por un aguerrido trío de voces femeninas, con las que no dejó de buscar su complicidad, nos sorprendió muy gratamente con temas de su primer album en solitario (“Here comes the bombs”, 2012) como “Hot fruit”, de su segundo largo (“Matador”, 2015) como “20/20”, “The English ruse”, “Detroit”, “The girl who fell to Earth” (con la banda al completo) o la misma “Matador” (con la que cerró su bolo de forma espléndida) y de su último trabajo (el calentito aún “World´s stronger man”, 2018) como “Deep pockets”, “Eal the walk”, “Wounded egos”, “Oxigen mask”, “Vanishing act” o el propio “World´s strongest man” que dió comienzo al show. Lamentamos no poder disfrutar de ningún tema de Supergrass como nuestros favoritos “Caught by the fuzz”, “Richard III”, “Moving” o el clásico del britpop “Alright”.
El Top 5 se lo dejamos a un Noel Gallagher que con sus High Flying Birds venía en estado de gracia a presentarnos su rotundo “Who built the Moon?” editado el pasado año. Sólo tres espléndidos albumes pero que han hecho olvidarnos por un momento de su mítico pasado en Oasis, pasado que rescató en Bilbao en forma de cinco pelotazos que fueron corerados hasta la afonía por toda la campa del monte Kobetas: “Little by little”, “The importance of being idle”, “Half the world away”, y, como no, “Wonderwall” y la, al menos para mí, mejor canción de la década de los 90, “Don´t look back in anger”. Sólo el poder haber podido disfrutar de estos dos últimos temas a escasos metros de Noel y echar a perder la garganta para todo el fin de semana compensan con creces el precio del bono de los tres días. Para acabar el show se marcó un homenaje a los Beatles en forma de “All you need is love” que desató, aún más, el parraque colectivo.
De momento este ha sido nuestro Top5 pero aún quedan momentos mágicos para contaros en una segunda entrega.
Estad atentos!
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- BBK Live 2018: Galería de fotos 11, 12 y 13 de julio, en Bilbao
- BBK Live 2018: Galería de fotos 11, 12 y 13 de julio, en Bilbao – Parte II
Este reportaje también lo puedes leer en Nos Vemos en Primera Fila.
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Este artículo fue publicado originalmente en La Factoría del Ritmo Número 26 (sección: ).
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