Una de las cosas que tiene esto de reseñar discos es que a veces, tal vez menos frecuentemente de lo que una desearía, te topas con verdaderas sorpresas que te dejan boquiabierta.
Protagonista del artículo: Four Ways
Temática: Música Metal
Estilo: Heavy metal
Discográfica o editorial: Big Bang Music Año de publicación: 25
Concepto: Álbum Soporte: CD
Redactor: Cristina Cuenca
Se trata de grupos absolutamente desconocidos que te sorprenden tan gratamente que acaban convirtiéndose en algo muy querido, en una especie de oculto tesoro que una desvela a los demás con la excitación de quien comparte un asombroso secreto con sus amigos. Pues bien esto es lo mismo que me acaba de ocurrir con Four Ways. Un potentísimo cuarteto que me ha cautivado totalmente con su enérgico y fresco heavy metal. Dos años han pasado desde que estos Sevillanos editaron su primer trabajo bajo el título “Long way”. De nuevo regresan a la palestra con un nuevo trabajo “From the ashes” mucho más maduros y con algunos cambios en la formación. Rezuman autenticidad y desbordan pasión, algo desgraciadamente poco habitual en el árido desierto de espejismos que a veces es el panorama del heavy nacional. Musicalmente, nos encontramos igualmente con una secuela absolutamente continuista del primer disco. Heavy metal clásico y melódico enraizado en el Hard rock, con elementos de los 80. Además, y como elemento más importante, luce la facilidad del grupo para componer buenas canciones que suenan frescas y enérgicas pese a lo obvio de su propuesta. Si bien puede ser aún más dura en su sonido, la banda impregna una vez más de melodía y buenos estribillos el álbum, todo gracias a un Rikky que se asemeja a los grandes de este mundillo. Una voz sublime para la música que realiza el grupo. FOUR WAYS tienen la agradable virtud de componer temas sencillos y directos pero llenos de gancho y feeling. Las guitarras se doblan en clásicas armonías y se suman en agresivos riffs, y la base de ritmo tiene un groove de lo más añejo, y consigue llenar cada rincón del sonido del grupo sin sonar pretencioso ni omnipresente. El plástico se compone de once cortes. Comenzamos con un tema bastante heavy como “I’ll die”, para en “Woman in chains” encontrarnos un tema mucho más melódico, donde las voces llevan solas hacia un buen estribillo. “Your love is my religion” es un tema más extraño y oscuro, con unas guitarras más pesadas y un gran Rikky al frente, dando potencia al tema a las voces. “Can I believe in you?” sigue los parámetros de anteriores temas para seguir con “Maybe i’m a fool” donde ganan protagonismo las guitarras. Con “ Man on the moon” llegamos a uno de los temas más apasionantes, un bajo muy marcado, unas melodías vocales muy potentes. Llegamos a canciones como “ My eye on you” u “Ocean song” dos temas muy bien estructurados que nos dejaran con un buen sabor de boca. El disco continúa con “She’s the devil” un grandioso tema cargado de fuerza y potencia y con unas atractivas melodías, sin duda, será uno de los temas estrella en sus directos. Para terminar nos encontramos con un tema de corte más típico, en una onda muy hardrockera “Dog Smile”. La mayor virtud de FOUR WAYS en este disco, por lo tanto, ha sido el paso importante que han dado a la hora de flexibilizar y dinamizar su sonido con diversidad de influencias. Y lo ha hecho sin perder su raíz y su base de heavy metal clásico, que sirve como eje vertebrador y da unidad a todo el disco. No sé si este punto estilístico ha sido algo consensuado y meditado, o tan sólo el resultado natural del momento evolutivo en el que se encuentra un grupo que, en cualquier caso, sale muy reforzado y con brillantes expectativas de cara a próximos trabajos, al margen de que, sin duda, “From the ashes” es una atractiva opción para los amantes del Heavy metal de toda la vida. Un disco muy recomendable! Comentario: Cristina Cuenca.(Fecha de publicación: 2005/06/12)
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