Un grupo que se abre paso, proponiendo un metal que bebe del sonido de leyendas como DRI, Poison Idea o Suicidal Tendencies. Acaban de lanzar su primera maqueta.
Desde Extremadura, tierra sin demasiadas oportunidades aunque con una escena musical bastante atractiva, nos llega Ilex, un grupo de metal cacereño que acaba de debutar con su primera maqueta. Escuchar los cinco temas que la componen es pasar de un plumazo de Overkill a Tool, obviando, afortunadamente, toda la frivolidad y la morralla del nu metal en la que han caído muchas bandas que fueron a lo fácil. Pero en Ilex también late, quizá de manera menos consciente, ese estilo más hardcore que cultivaron grupos como DRI, Poison Idea o Suicidal Tendencies. En el primer trabajo de esta banda extremeña, a decir verdad, encontramos thrash y hardcore a partes desiguales, todo dependiendo del tema o los momentos y distintos estadios de una misma canción. Si bien la maqueta arranca al más puro estilo Machine Head, en seguida notamos que es una cuestión de guitarras dentro del corte inicial; a medida que uno avanza se topa con una voz y unas percusiones cercanas al hardcore o, si se quiere, al crossover. Ambas tendencias se funden sutilmente en el último tema, “Sleepwalker”, muy característico en este sentido.
Resulta curioso cómo, sin salirse del género, Ilex, ya en su estreno, consigue elaborar un metal genuino, fusionado, nada posmoderno, sin pastiche. Se trata de tomar grupos que supieron ser innovadores, estar a caballo entre varios estilos y practicar una música acorde a los tiempos, para remodelarlos, es ahí donde se sitúa Ilex. Los extremeños sobrevuelan SDI, Anthrax, Pantera o Biohazard y hacen lo propio en la escena contemporánea. ¿Thrash a secas, metalcore, groove, metal garajero? El género evoluciona e Ilex es prueba palpable de ello.
En Cáceres el surgimiento de esta banda supondrá, salvando las diferencias formales, lo que hicieran los pacenses Darksound. Pero a los integrantes de Ilex les queda todavía una larga travesía por las injusticias de la industria discográfica, el abandono de las instituciones o locales sin criterio que sólo buscan la rentabilidad económica inmediata. Esta joven formación, que necesita del directo para seguir desarrollando su estilo y pulir su sonido, no lo va a tener nada fácil. Saber jugar con los plazos, tener en cuenta las nuevas tecnologías o mantener la perseverancia son claves en este proceso. Es de justicia que Ilex no se abrume en el intento.
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