Si te gusta el metal y también te gusta encontrarte con cosas sorprendentes, este grupo cántabro te sorprenderá con una propuesta original y muy conseguida.
Lo cierto es que llevaba muchos años escuchando parabienes de este grupo, pero hasta el pasado verano no tuve la oportunidad de escucharles… un compañero de trabajo me dejó su segundo disco y le pude dar un par de pasadas… pero es ahora cuando realmente les estoy descubriendo, con su tercer álbum, y lo cierto es que no están nada mal.
Se formaron en el año 1996 y parece ser que al principio tiraban hacia Living Colours y Suicidal Tendencies, testimonio de esa época es su primera y única maqueta distribuida, "Bultos Rarus", pero cuando hubo algunos cambios en la formación y terminaron siendo un trío, dieron un giro a su música y se encaminaron firmemente hacía el camino que parece definitivo… un metal experimental, con mucho jazz y con evidentes similitudes como Primus, Mr. Bungle y Phantomas.
Y esto es precisamente lo que nos encontramos en "The Repugnant Album", un disco de catorce canciones, presentado de forma magnífica (un precioso digipack con una espectacular presentación y un DVD de bonus), con un planteamiento escatológico lleno de humor (los títulos de las canciones son para fijarse en ellos… "Gas From The Ass", "Anal Posesión" o "Puerco Jhonson" por ejemplo) y un sonido realmente bueno (el álbum se ha grabado en Estudios Sonido XXI).
Pinchar el disco es sumergirse en temas que están llenos de cambios, construidos principalmente sobre una ambientación oscura, en los que se alternan pasajes relajados, donde el bajo suele ser el protagonista, y otros donde la tormenta guitarrera cobra vida. A destacar el espectacular trabajo vocal del cantante… que es capaz de ser épico, de ser gutural y también melódico.
Para quienes ya conozcan a sus grupos referencia, los ya citados antes (aunque la banda también reconoce influencias de Napalm Death, Naked City, Ruins, King Krimson, Meshuggah o Dillinger Escape Plan), el factor sorpresa de este disco será menor… aunque se congratulen de que alguien en nuestro país se aproxime con éxito y credibilidad a esos planteamientos. Pero para los aficionados al metal que busquen nuevas experiencias y no hayan escuchado a aquellos grupos el impacto puede ser brutal… Una banda llena de requiebros, que epata no solo por la saturación de intensidad, sino por la combinación de elementos dispares, chocantes y sorprendentes.
En definitiva, un disco la mar de chulo, con gran sonido, con una propuesta que para nuestro país es muy original, y que demuestra que el metal aún sigue siendo un estilo donde se puede innovar y sorprender.
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