¿Quién dijo que es España no se podía hacer buen rap?.
Seis B.boys, dos negros y cuatro ¿blancos?, cinco rappers y un dj, rimas brutales, rapidas aveces, otras sencillamente a la velocidad de la luz, una posición clara y violenta, contestaria y contundente. Escucharles y quedar impasible es imposible. Sus ritmos funcionales, sin grandes alardes, pero siempre correctos con una utilización de samplers nunca evidentes, con fraseos incansables y enrevesados, pueden destrozar los esquemas a cualquiera.
Una posición abiertamente antifascista con flechas envenenadas para racistas (“…todos los moracos, todos los polacos, todos los negratas, si quieres seguir viviendo mas te vale que echeas patas porque si no…”, dicen en “Zona Bruta”), neo-nazis (“…que nadie hable, que te calles, no valla a ser que’l facha rabie y coja la pistolita a su padre…”, en “La fundación de la rima Transksacional”), ultra-Sur (“…machacado si fuera un machacador, un momento es posible que lo sea cuando vea un ultra-sur…”, “El vertedero de palabras”) y en total, contra cualquiera que ose ponerse por delante de estos tipos que desprenden rabia en su actitud, sus fotos y su música (“…siempre que yo pase apartate del medio…”, Psicopata).
Los medios comerciales musicales tampoco escapan a sus críticas: “…productores, managers y medios, no olvideis vuestra camisa en vuestro entierro…”, dicen en “El funeral” y en “Scratchapella”, su peculiar forma de enseñar a bailar rap, reparten estopa por igual para la televisión y los nazis.
La verdad es que Madrid Zona Bruta es un disco que se merece muchas escuchas, imprescindible para los aficionados al hip hop y muy recomendable para las personas que se les hace demasiado duro escuchar el rap americano, por el idioma, o simplemente que hasta ahora no comprendían el estilo.
El Club de los Poetas Violentos, simplemente “…HIPHOP RAP duro, chulo, rudo y crudo…” (“Zona Bruta”).
Comentario: F-MHop
Sobre los autores del artículo:
