El Sobrino Del Diablo: Su mejor disco… hasta el momento

El Sobrino Del Diablo: Su mejor disco… hasta el momento
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Observaciones: Fotos por cortesía de El Sobrino del Diablo

El Sobrino del Diablo

Tras el nombre de El Sobrino de El Diablo se esconde Juan Gómez, un cantautor barcelonés que se caracteriza por la acidez de sus letras y por su eclecticismo musical.

Tiene ya editados tres discos en el mercado, además de varias maquetas publicadas, y desde hace tiempo tiene una banda estable de músicos, con los que se acerca mucho al formato de un grupo de rock, vertiente que alterna con un formato acústico en solitario.

Su último trabajo es “Pulgatorio”, un álbum en el que presenta sus canciones más inspiradas y para el que además se ha realizado un trabajo de producción musical muy cuidado.

El Sobrino del Diablo

Este nuevo álbum es el que me parece que tiene una producción más cuidada y unos arreglos más matizados… ¿qué diferencias ha habido, en medios, tiempo y planteamiento, entre este disco y los dos anteriores?

Realmente ha habido un cambio con lo anterior, no en el espíritu pero sí en el método: hemos dedicado los mismos medios pero más tiempo y lo cierto es que con calma se trabaja mucho mejor. El 90 % de gente que ha escuchado “Pulgatorio” dice que es el mejor de nuestros tres discos y yo estoy de acuerdo (y mis músicos también). Creo que aúna lo mejor de los dos anteriores: el sonido compacto del primero y el espíritu gamberro del segundo. Además, es el más coherente en cuanto a track list: las canciones, siendo muy diferentes entre sí en cuanto a estilos, tienen algo en común: un tono entre nostálgico e irónico, un sonido setentero. Es la diferencia con “En las Nubes”, que venía a ser un “grandes éxitos” de mis maquetas anteriores y “Hades Tiempo”, en que las canciones fueron escogidas vía Internet por nuestros seguidores y, aunque creo que fue una buena selección, el resultado era algo desequilibrado. “Pulgatorio” está como más pensado y madurado.

El álbum ha sido producido a mediante entre tú y Juan Zarppa… ¿Qué te llevó a trabajar con él? ¿Qué funcionó en vuestro tandem?

Habíamos coincidido en varios escenarios y me gusta mucho lo que hace con sus bandas (Juan Zarppa’s Experience y los Cangrejos). Ha sido el co-productor ideal porque no sólo aportaba buenas ideas sino también un total entendimiento de nuestra filosofía: como técnico de sonido ha sido muy superior al que trabajó en “Hades Tiempo” y encima nos ha puesto unas guitarras slide fantásticas. Te puedo decir desde ya que el cuarto disco lo grabamos con él fijo.

En este nuevo disco hay algunas canciones que me sugieren que tal vez estén inspiradas en tus propias experiencias… en algunas incluso lo dices… En el caso de “Javi Metal”. ¿Hay algo de autobiográfico? ¿Fuiste tú un aficionado al heavy metal?

Mis canciones no son autobiográficas, son ficción: pero explico historias que le podrían pasar a cualquiera y por tanto también a mí mismo. En cuanto a Javi Metal, la anécdota no me pasó pero sí es cierto que con 15 años yo iba con mi chupa tejana sin mangas, mi camiseta negra y chapas de Deep purple y Barón Rojo.

Y si fue así… ¿te sigue interesando el estilo? ¿estás al tanto de las bandas heavys nacionales que en los últimos años tienen bastante éxito?

Me gusta mucho el rock duro pero soy un poco retro: apenas escucho cosas posteriores a 1987. Me encantan las bandas de la franja entre 1970 y 1984, como Thin Lizzy, Whitesnake (aunque cuando empecé a entender las zafias letras de David Coverdale me limité sólo a las músicas), Meat Loaf (éste sí era un gran letrista, sus canciones están llenas de ironía), Iron Maiden, Led Zeppelin, Marillion (época Fish), Black Sabbath, Van Halen o Rush.

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En cuanto al “Luchador Manco”… ¿Existió realmente ese personaje y esa película?

El personaje real me imagino que no. La peli sí y es verdad que yo la vi con 12 años. Ahora me han dicho que ha salido en video pero no me atrevo a verla. Igual la idealizaba mucho por mi edad y ahora me parece una absoluta burrada, como “Kill Bill”, que para mí es la peor película con diferencia de Tarantino.

Respecto a “El fútbol es el opio del pueblo”… Lo cierto es que no puedo estar más de acuerdo con tu letra. Y aprovechando que eres catalán y allí vives.. temas como los “papeles del archivo de Salamanca”, la rivalidad “Barça-Madrid” o las tensiones entre el gobierno estatal y el de tu comunidad… ¿están produciendo tensiones que antes no había y que ahí se perciban por la gente como preocupantes?

Los extremos ideológicos siempre se tocan y sí que percibo una radicalización de las posturas más provincianas y neandertales de lo que yo llamo la España Negra y la Catalunya Profunda: dos tipos de nacionalismo expansionista y estúpido que a mí, como apátrida vocacional que soy, me dejan frío cuando no estupefacto. Y con el fútbol pasa lo mismo, funciona como una secta para débiles mentales. En mi humilde opinión, la gente debería ver menos fútbol y leer un poquito más.

“Soldaditos” es la canción en la que dices claramente que es una experiencia vivida… El caso es que el ejército está tan desprestigiado en nuestro país que pocos quieren ir… ¿crees que el ejército es un mal necesario? ¿con personajes como los que describes… habrá que defenderse algún día del ejército?

Es la única canción basada en hechos reales. Seré utópico pero pienso que el ejército es un mal INNECESARIO. Es de sentido común que las cosas no deben resolverse a tiros. Y si no mira en que se ha convertido Irak tras la invasión yankee que pretendía “imponer” (vaya contradicción) la paz: está peor que estaba y muere mucha más gente.

“Juan Enrique” es una descripción muy clara de una persona y sus avatares… ¿está inspirada en alguien a quien conoces?

En nadie en concreto y en todo el mundo a la vez: que la gente se queda en la puta calle gracias a las multinacionales está la orden del día.

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¿Y “Gauche Divine”? ¿También está inspirado, o va dirigido, a alguien en concreto?

Es una de mis canciones más antiguas: la compuse en 1995 con motivo de las acampadas por el 0,7 en que, lamentablemente, la gente iba básicamente a ligar. Siempre ha sido polémica porque se basa en mi tesis de que hay que rechazar el 0,7 por ser una limosna: más vale intentar cambiar las cosas de raíz y que dejemos de robar al tercer mundo que seguirle robando y devolverle el 0,7 de lo que le robamos para tener la conciencia tranquila. La Gauche Divine (izquierda divina, marxistas de salón) es aun peor que la derecha: con una mano pide igualdad y reformas y con la otra ata sus propias posesiones capitalistas. Al menos la gente de derechas de toda la vida no se avergüenzan de ser fachas.

“Ricardito” es tal vez mi canción favorita del disco. Describe bastante bien a un “personaje” al que tengo que tragar cada día para pagarme “las lentejas” y, entre otras cosas, poderme permitir “financiar” La Factoría del Ritmo… Y en cuanto a la alusión a los políticos… puede parecer exagerada, pero la verdad, les tengo cerca y los describe con una precisión que asusta. ¿Tienes un “Ricardito” cerca? ¿Conoces a los políticos “de cerca”?

Que va, por suerte no conozco a ningún político. Pero tal como funciona el sistema democrático dentro de un sistema capitalista neoliberal con su inherente corrupción, Ricardito podría ser el perfil de cualquier político con un mínimo de poder.

Respecto a DJ Monkey… Fantástica. Todo un puntazo. No te gusta la música electrónica en general o… simplemente es una crítica para un sector muy concreto que la ensalza casi como religión y vacía su mente y sustituye sus neuronas por un… “pumba-pumba-pumba”…

Salvo excepciones, la música electrónica no me interesa demasiado. DJ Monkey es una crítica a la “cultura” (por llamarla de alguna manera) del pumba-pumba, como dices, el coche tuneado, la ignorancia y la alienación que te lleva a meterte en una discoteca llena de prehomínidos que se meten todo tipo de drogas. Y supongo que se las meten porque, si no, no hay quien aguante esa música y menos a ese volumen inhumano.

Saliendo un poco del disco… Cuéntanos en qué ha consistido tu participación en la obra “Cómicos de Barra” del Terrat…

Fueron cuatro meses y unas 80 funciones en que dos cantautores satíricos y cuatro actores montábamos un espectáculo a medio camino entre el teatro, el monólogo y la música. Fue muy interesante y no descarto volver a embarcarme en ago así. Uno de los actores del show, Víctor Virtuoso, colabora en “Pulgatorio”.

El Sobrino del Diablo

Sabemos que has participado en varios programas de Andreu Buenafuente… aunque desgraciadamente nos los hemos perdido… ¿qué hiciste en esas apariciones? ¿cómo surgió que Buenafuente se interesara por tu música?

Básicamente tocar “Encuentro con Dolores” (en la tele y en la radio), canción por la que Andreu siente especial predilección. Él me vio varias veces tocando en un bar en el 2003 y le gustó. Por eso me invitó al programa.

También desde la edición tu anterior trabajo has colaborado con Julián Hernández y con Sabino Méndez… ¿en qué ha consistido esas colaboraciones?

Con Sabino grabamos la canción Pop Latino a medias en mi primer disco (2002) y realizamos una pequeña gira juntos, tocando en Bilbao y Segovia. También me escribió el prólogo a mi libro sobre Phil Lynott. Ahora se dedica más a escribir que a la música y nos vemos a menudo en nuestro barrio común, Horta para tomar un cortado.

Con Julián Hernández ha habido más cosas: colaboró también en En las Nubes. En 2003 toqué con Siniestro en la presentación de “La historia del blues total” en Barcelona. Y luego incluyeron una versión mía de su canción Pueblos del mundo en su recopilatorio Quiénes somos…

Este año (2005) Julián incluyó dos canciones mías (“Trinoceronte” y “Soy un asesino”) en el primer disco de su nueva compañía (Discos de freno), llamado Nuevo folk Post industrial, junto con temas del mismo Julián, Bosco el Tosco, Pablo Novoa o Víctor Coyote. En mayo pasado presentamos el disco en directo en Madrid con notable éxito y seguiremos haciéndolo por Galicia, Euzkadi y Catalunya.

Das conciertos con dos formatos… el rockero con trío y el acústico en solitario… ¿qué formato es el que más se te pide? ¿con cuál estás más a gusto?

Toco más en acústico porque hay más lugares donde hacerlo. Pero me gustan los dos formatos por igual: tocar sólo tiene el encanto del monólogo y la improvisación. Con la banda suena mejor y más potente y disfruto también mucho tocando la guitarra: aflora el rockero que llevo dentro.

Si alguien que lee esta entrevista quiere contratarte… ¿cuáles son los pasos a dar?

Basta con ponerme un email a

elsobrinodeldiablo@hostalmusical.com

…y ya está. No tengo manager y soy relativamente “barato”: quizá por eso hago una media de 12 conciertos al mes.

Parece ser que fuiste profesor bachillerato y también que sueles actuar en institutos… ¿esa faceta profesional la has dejado totalmente o la practicas de vez en cuando? ¿han cambiado mucho los jóvenes respecto a cuando tu estabas sentado del lado de los alumnos?

No lo he dejado del todo. Más o menos una vez al mes hago un concerto en Instis. Me gusta mucho trabajar con ese tipo de público porque son sinceros, tienen menos prejuicios que los adultos: si no les gustas, pasan de ti pero si les gusta lo que haces son muy entusiastas. Y de paso siembro una semilla para el futuro, porque serán mi público dentro de unos años.

Por otro lado, sí han cambiado cosas pero un adolescente sigue siendo alguien en un momento clave de su formación al que hay que saber motivar para que vea que en la vida hay más cosas aparte de los móviles, la tele y la Play Station. Me emociona ver a un chaval de 13 años con una camiseta de Led Zeppelin: aun hay esperanza para el rock si alguien lleva un emblema de un buen grupo que desapareció antes de que él naciera.

Este artículo fue publicado originalmente en La Factoría del Ritmo (sección: ).

Sobre los autores del artículo:

F-MHop
Jefe de redacción de La Factoría del Ritmo desde su fundación en 1995. Ha colaborado en diversas publicaciones musicales, entre las que se encuentran Rockdelux, Hip Hop Life, Hip Hop Nation, Serie B, Metali-k.o., Zona de Obras, Pulse! Latino o Astur Music. También ha hecho radio, colaborando con Onda Cero, Arco FM y Onda Verde Gijón. También fue beatmaker en el grupo Soul Dealers, practicantes de un Hip Hop combativo y comprometido.

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