G3, Joe Satriani, Robert Fripp, Steve Vai: Pabellón Polideportivo De Mondragón (Álava). 2 De Julio 2004

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Originalmente la actuación del G3 estaba programada en la sala Jam de Bergara.

Pero los organizadores, ante las favorables perspectivas de venta de entradas, decidieron a última hora trasladarlo a un local más grande, por lo que acabó realizándose en el pabellón polideportivo de la localidad alavesa de Mongragón, donde ya se han celebrado otros eventos de este tipo con anterioridad.

Sin duda, la jugada les salió redonda a los promotores, porque el recinto se llenó, con lo que triplicaron sus beneficios aunque el sonido pagase las consecuencias. Casi siempre acaba pasando lo mismo, se programan conciertos en lugares que no están preparados para ellos, sobre todo en el aspecto acústico. Este era un pabellón con amplias cristaleras y techo bajo y, como cabía esperar, el sonido fue horrible y resultó bastante frustrante no poder escuchar con un mínimo de calidad músicos del calibre de Satriani,Vai o Fripp. Cada vez estoy más convencido que hay una amplia audiencia rockera que se conforma con cualquier cosa en este aspecto y por eso seguirá pasando, se tiene lo que el consumidor exige y está claro que hay consumidores que exigen bastante poco. Fueron éstos los que salieron tan contentos al final de la actuación, aunque el sonido desfasado de volumen y falto de definición nos hubiera dejado medio sordos a todos. También es probable que se encontrasen entre ellos los energúmenos que se dedicaron a abuchear a Robert Fripp durante su actuación, haciendo bueno el dicho popular “No se hizo la miel para la boca del asno”. Es indiscutible que la presencia de Fripp en el cartel era una apuesta arriesgada. La carrera en solitario del guitarrista británico es, si cabe, todavía más vanguardista y minoritaria que su trabajo en King Crimson y no era extraño que no le llegase a buena parte de los allí asistentes. Más aún, su propuesta de masas sonoras con ayuda de ordenadores era más apropiada para un teatro que para un gran recinto, en unas condiciones de audición inadecuadas. Pero nada de esto justifica los abucheos e insultos que recibió por parte de un sector del público que con ello demostraron no solo ser ignorantes, sino también irrespetuosos y maleducados no sólo con él sino también con todos aquellos que sí habíamos ido a verle. Si algo no te gusta lo coherente es que te vayas y vuelvas luego, no que se lo grites al mundo, una postura de fascismo musical demasiado habitual y que debería erradicarse por el bien de la cultura en general y de la música en particular. Por lo demás, y por lo que me dejaron escuchar, Fripp mostró un interesante experimento con ambientes y masas sonoras que merecía un sitio y un público más apropiados y que, por esa misma razón, y por la escasa media hora que estuvo en el escenario no comentaré con mayor detalle. Acentuó su imagen de excéntrico al tocar sentado en la parte trasera del escenario pero, a estas alturas, no creo que le importe mucho el que dirán.

El segundo en salir fue Vai, recibido con gran alborozo por un público entregado. Entre sus acompañantes, como en la anterior gira, se encontraban otros dos grandes pesos pesados, el bajista Billy Sheehan y el guitarrista y teclista Tony Macalpine, un auténtico derroche de virtuosismo en conjunto. Esto hizo aún más penoso el sonido del pabellón, los teclados de Macalpine estaban desaparecidos y el bajo de Sheehan se convirtió en algo grave e informe, perdiéndose en el camino todos sus matices, armónicos y detalles habituales. Un auténtico estropicio. A pesar de ello, estuvieron muy bien. Vai y Sheehan son licenciados cum laude en la escuela del espectáculo de Dave Lee Roth así que además de extraordinarios instrumentistas son magníficos “showmen”.

Estuvieron hiperactivos en un concierto donde no sabías muy bien donde acababa la música y empezaba la demostración de facultades o el espectáculo circense. En todo caso, dado el deficiente sonido se agradece su impactante presencia escénica. Parece que los años no pasan por ellos. Las partes dobladas y entrecruzadas a dos o tres guitarras y bajo son habituales en esta banda y el momento culminante fue, como suele ser habitual, la interpretación de “For the love of God”, desde hace tiempo tema emblemático de Vai.

Finalmente salió Satriani, y ni por esas mejoró el sonido, su guitarra estaba pasada de agudos mientras que los graves del bajo de Matt Bisonette se te metían en las tripas.

El concierto de Satriani fue un tanto lineal, perece que le gusta recrearse en su típico esquema de canción roquera instrumental. Empezó con “Satch bogie” y siguió en esa onda cañerilla boggie metal. Curiosamente sólo se apartó de ella en dos de sus canciones más logradas “Always with me, always with you” y “Flying in a blue dream”, dos de los mejores temas de rock instrumental de la historia. La comparación con temas más recientes como “I like the rain” (que es como un “Big bad moon” segunda parte) fue un poco odiosa y mostró que tras el valiente intento de renovación de “Engines of creation” ha preferido volver a lo seguro y predecible y se encuentra ya lamentablemente encasillado.

Como fin de fiesta habitual salieron los tres al escenario (Fripp sentado atrás en su línea habitual) para la jam conjunta, con el grupo de base de Satriani. Tocaron un tema de cada uno, destacando una buena versión del sensacional “Red” de King Crimson, y terminaron con una curiosa y cambiada versión del clásico de Neil Young, “Rockin´ in a free world” con Satriani cantando y Vai y Bisonette haciéndole coros. Parece que sus solos finales Fripp se congració con el público que sí celebró y aplaudió sus intervenciones. Menos es nada.

Lo cierto es que esta gente ha sido tan grande que aún no estando, ni con mucho, en sus mejores tiempos, pueden ofrecerte una actuación vibrante e impecable. No se puede decir lo mismo del sonido, algo que no merecían tres leyendas vivas del mejor rock. Una pena.

Artículo por: Oscar García del Pomar Corada
(Fecha de publicación: 17/06/2004)

Este artículo fue publicado originalmente en La Factoría del Ritmo (sección: ).

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