Ahora que el metal clásico vuelve a estar de moda en Europa – en Estados Unidos, no, allí manda la todopoderosa MTV, que no ha decidido todavía relanzar el estilo en tierras yankis – , conviene echar un vistazo por encima de las obvias referencias continentales.
De entre la pléyade de grupos metálicos americanos destacan por méritos propios Nevermore, una formación de Seattle ( nada que ver con el grunge) que surgió hace años de las cenizas de otro grupo de culto de los ochenta: los Heavy – thrash, y amigos de Megadeth, Sanctuary, quienes editaron dos discos sin suerte alguna a pesar de su contrastada calidad.
Nevermore merecen mejor destino. Ya tuvimos ocasión de corroborarlo con motivo de su visita a España en un paquete que incluía a Angel Dust y los fabulosos Overkill. En aquel concierto, Nevermore dejaron claro que no son flor de un día, aunque hoy por hoy tengan que subsistir del mercado europeo, el único que presta atención a su música.
A todos los seguidores de los grupos mencionados recomendamos este acojonante “Dreamin neon black”, soberbia alternativa a toda la invasión citada y donde podrán encontrar todo lo que un fan del género que se precie espera: guitarras desgarradoras, pesadas y humeantes, una sección rítmica de órdago y un vocal alejado del estilo gritón de sus colegas europeos.
Comentario por: Dr. Willet.
Este artículo fue publicado originalmente en La Factoría del Ritmo Número 9 (sección: Discos, Internacional).
