Recuerdo aquella canción, “Okupación”, un himno que en mis años de instituto pasó de mano en mano, en unas cintas piratas de sonido deplorable.
Así conocí a Barricada y así conocí al Drogas. Un nombre macarra, peligroso y a la vez misterioso… la imaginación mandaba, y lo situamos como a un auténtico devorador de sustancias prohibidas.
Después recuerdo el extender la voz para conseguir las cintas anteriores de “los Barri”. Conseguimos “No hay Tregua” y “Barrio Conflictivo”. Flipamos. La atención se desvió de la falsa leyenda que inventamos sobre el Drogas, a un retrato fiel y crudo de una realidad que no nos era tan lejana… “…ya estamos llegando a mi barrio, ¡corre !, ¡corre !, ¡trágate las señales !…”. Futbolines, cerveza, cantos a grito pelao, las miradas de la gente y un nuevo disco… “Rojo”. ¡Uhm !, ¡que recuerdos !.
Su camiseta, su siguiente disco, su doble en directo, votes y sudor en dos de sus conciertos (“La plaza del Gas” en Bilbao y “La Sindical” en Salamanca), con los colegas entonando sus estribillos a coro. El auge de Barricada, un día pones la tele a las tantas y te encuentras con un reportaje sobre el grupo (en “Rápido”), descubres que no son tan fieros como te crees… sus madres están orgullos de ellos y el Drogas confiesa que compone por la mañana, después de llevar a los niños al cole… ¡Vaya !
La olimpiada del 92 la vivimos enganchados al “Frío”. Era verano, pero Enrique Villareal (verdadero nombre del Drogas), había sacado un disco bajo “Txarrena”. Un puñado de canciones que no escapaban de la órbita de los Barri y que contenía una versión del legendario tema de “Alarma ! ! !”. “Espero que esos tíos escuchen esta versión y que les guste…” se refería al trío liderado por Manolo Tena, quien por aquel entonces todavía era un maldito del rock español.
Después vendrían una serie de discos del grupo Navarro que les fueron aproximando hacía el declive… perdí el interés tras “La Araña”, y conmigo mucho de su público… ¿se hacían mayores ellos o nos lo hacíamos nosotros ?.
Y llegamos a finales del 98. Un catálogo de venta por correo en mis manos y… “¿La Venganza de la Abuela ?… ¡puff ! vaya nombre…¿cómo ? ¿a ver ?, ¡si es el Drogas !…”.
Sí, ha vuelto. El que fuera y es, legendaria voz de los Barricada, lanza un nuevo disco… nuevo proyecto, nuevo grupo, nuevas ideas.
Lo recordaba…. Enrique es un tipo inquieto, ya hace tiempo le oí decir que la banda vasca más interesante era “Negu Gorriak” y que le gustaba estar al tanto de lo que se hacía por ahí… también de su pasión por “Rage Against the Machine”. Y a esto hay que sumar su gusto por el metal industrial (“Godflesh”, “Nine Inch Nails”), por “Asian Dub Fundation” y por “…muchos grupos de Hip Hop que escucho y que no tengo ni jodida idea de quienes son…”. 
¿El resultado ? : un CD dividido en dos partes. Una primera de rock en formato tradicional, que trata de recoger el espíritu de los ensayos junto a “Juanjo Ojeta” (guitarrista que ya le acompañó en Txarrena) y el cuarteto “Konfusión” al completo, quienes completan su nuevo proyecto. Y una segunda parte, donde se entregan a los nuevos sonidos, con programaciones, bucles y el latido de lo industrial.
Las nuevas canciones, donde abunda la influencia del funk-metal, se centran en el análisis de los medios de comunicación, el cuarto poder que amenaza la libertad en nuestros tiempos.
En directo, “La Venganza de la Abuela” se presenta sin la artillería tecnológica, pero con toda la caña que sus componentes pueden dar… músicos maduros pero curtidos. Ilusionados pero realistas. No tienen prisa, ni quieren emular el éxito de “Barricada”, a quien por cierto tal vez volvamos a escuchar algún día…
“La Venganza de la Abuela”, realismo crítico con los cimientos en la experiencia y las parabólicas a todo trapo.
Texto por F-MHop.
Sobre los autores del artículo:
