Hablar de éxito o de buenos discos es muy fácil, sobre todo cuando el grupo en cuestión te gusta.
Hace cinco minutos que me senté frente al ordenador, hace cinco minutos iba a hablar del éxito de algunos grupos de la ciudad de Nueva York (en la que he vivido dos años y medio) Hace cinco minutos iba a hacer un alarde de conocimientos, muy discutibles por cierto, de la escena independiente de NYC; podría haber mencionado un par de calles famosas, algún que otro mítico club o incluso algunos de los nombres de las bandas mas exitosas del circuito local.
Pero ya han pasado esos cinco minutos y pienso que esa información esta al alcance de cualquiera que demuestre un poco de interés por saber lo que esta pasando en esta ciudad que, al contrario de lo que dicen las habladurías, duerme mucho.
Pasados los cinco minutos me he convencido a hablar de fracaso … para la gente común fracaso … para mas de uno/a ESPERANZA.
Voy a hablar de un grupo llamado Yoke. Hablar de Yoke es hablar de su líder Ilias Muratov. Ilias es un ruso que debe correr por sus treinta y pocos, a parte de ser el líder, compositor y cantante de Yoke es pintor (tampoco en esto esta teniendo mucha suerte a pesar de haber expuesto en la ciudad mas de una vez … pero debería. Una de las cosas mas valiosas con que regreso a España es una pequeña colección de copias de algunos de sus dibujos eróticos).
No tiene trabajo fijo e intercala los conciertos de Yoke, con algún trabajo de construcción (pintura de brocha gorda más concretamente) y también a veces algún compatriota encargado de algún restaurante le deja hacer retratos a los comensales. Y así, poco a poco consigue reunir su alquiler. La verdad que es un privilegiado … vive en una de las zonas más caras de la ciudad y paga al mes lo que muchos vecinos de su calle desperdician en varios días.
Su cuarto es tan grande como lo pueda ser el salón de tu casa y tiene apilados cientos de oleos escalando angustiados a los techos altos. Entre los papeles tirados por el suelo se distinguen revistas de música, alguna pornográfica, algún disco de vinilo … y de alguna forma, inexplicable para mí, él siempre parece saber donde está todo: la perfecta desorganización. De todos modos a mi me encanta su casa pues siempre hay algo interesante que hacer, a veces fumamos, a veces toca música, a veces veo sus últimos bocetos y a veces observamos con agrado el improvisado pase de ropa interior que la vecina de enfrente nos regala con deliciosa y adolescente naturalidad.
Yoke no es el típico grupo MTV( de tres a cinco componentes que podían ser modelos o actores de TV a los que los tatuajes y pendientes parecen crecer como setas en el bosque)… nunca lo va a ser, ¡¡no lo quieren ser!! Yoke lo componen 10 personas: tres piezas de viento, batería, percusionista, bajista, guitarrista, cantante principal (Ilias), una cantante de opera y un rastaman llamado Sharkman.
Se autodefinen como una banda de swing-salsa-jazz-latin-russian-folk …aunque todas las letras que hay escritas en las etiquetas, que ellos mismos se ponen, se desvanecen al escuchar las primeras notas de sus intensos conciertos. Su sonido es imponente y obliga a desahogar tus convicciones musicales y, al mismo tiempo, te invita a disfrutar de sus ritmos pegadizos. Los conciertos son un espectáculo de principio a fin. El despliegue de talento artístico e interpretativo es regado por las gotas de locura que escapan de Ilias, que siempre expresa su ruso dramáticamente.
Y cuando estas locuras están a punto de hacer a los primerizos plantearse si fue o no buena idea venir al concierto aparece Sharkman rapeando en jamaicano y deja a todo el personal con la mandíbula en el suelo. Entonces, cuando estás realmente convencido de que esta banda merece la pena, que son unos innovadores y que seguro repetirás en su próximo concierto emerge en escena la voluptuosa figura de una cantante de opera y consigue que el publico desprecie, por un momento, todos los conciertos a los que han asistido en su vida.
Por desgracia, y por falta de medios, solo han podido salir de Nueva York unas cuantas veces (Boston, Wahington, Philadelphia … la verdad es que no es para ellos fácil salir de NYC) y han estado los últimos tres años ofreciendo conciertos en la ciudad desarrollando continuamente su sonido y espectáculo en vivo. Han conseguido establecer una escasa pero fiel legión de seguidores que repiten, con entusiasmo, cada concierto. La mayoría de estos fans son inmigrantes rusos que se sienten identificados, en muchos casos, por las letras que hablan desde la vida en la antigua Union Sovietica hasta la dificultad de la vida en Nueva York.
Su álbum de debut (llamado como ellos, Yoke) fue editado en 1999 y ha tenido una escasa pero constante distribución local (y en diversas paginas web de venta de música). Ha sido grabado y mezclado en los estudios Sonic Shop por George Dugan quien ha trabajado con legendas como Miles Davis o Betty Carter.
Actualmente están en el proceso de grabación del que será su segundo disco y aseguran que estará lleno de colaboraciones estelares aunque Ilias asegura no tener prisa y confiesa estar tomándoselo muy despacio.
El día 23 de Febrero Yoke han dado su último concierto, pero Ilias no está muy ilusionado, sabe que necesitan ser un grupo mas unido (varios de los músicos simplemente actúan por dinero pero sorprende lo bien que suenan siendo así, Ilias sabe que Yoke puede llegar a sonar mucho mejor con todo el grupo unido. Son todos unos músicos excelentes pero la química se esconde tras la frialdad de algunos componentes).
Yoke-Outrun.mp3
Extracto del tema “Outrun” del CD “Yoke” de Yoke.
Formato MP3. 22 KHz. 64 kbps. Sonido estéreo.
33 segundos aproximadamente. 259 Kbytes
Por cortesía de Yoke.
Artículo: Sergio de Luz
(Fecha de la publicación: 21/03/2002)
